Primer renglón

Renglones torcidos... todos los días la portada de los diarios son renglones torcidos... ¡locos fingiendo cordura o cuerdos fingiendo ser locos!, ¡o locos y cuerdos sin más!.

Dicen que en Guantánamo algunos de los prisioneros que EE.UU relaciona con Al-Qaeda se están volviendo locos. Tienen visiones y oyen voces, y todo porque permanecen encerrados durante 22 horas al día en pequeñas celdas sin luz natural ni aire fresco. ¡Malditos locos terroristas!. Vale, retiro lo de terroristas porque ninguno ha sido condenado y a muchos de ellos ni siquiera se les ha acusado formalmente. Pero Bush es un tipo cuerdo y tiene claro que el hecho de que todavía no se tengan pruebas concluyentes no significa que no puedan ser culpables, así que no se les puede conceder el privilegio de respirar o de ser tratados como seres humanos.

No, no, no, tampoco sirve como excusa que en la cárcel de alta seguridad de ADX-Florence los asesinos en serie y los terroristas más peligrosos tengan permiso para tener una televisión en la celda y dos llamadas telefónicas al mes. Ya sabemos que las comparaciones son odiosas. Además, a los prisioneros de Guantánamo ya se les deja leer el Corán y otro libro para distraerse ¿qué más quieren? ¡son presuntos culpables!...

-"¿Y no son presuntos inocentes?"

¡Cállate loco! Todos sabemos que los renglones torcidos no son una cuestión de forma sino de fondo y si tú no lo entiendes será que no sabes manipular el periódico de tal forma que puedas leer los renglones correctamente.

-"¿Y si el loco eres tú?"

¡Claro, o Bush!, ¿no?