Reconozco mi inutilidad para saber si el sistema de pago a los trabajadores basado en la productividad es un concepto socialista o capitalista y ahora que conozco la respuesta me surgen nuevas dudas.
El viceministro cubano de Trabajo ha asegurado hoy que a partir de ahora en la isla se cumplirá el “principio socialista de distribución”, donde cada cual cobre según la cantidad y la calidad de su trabajo. Y esto me deja muy preocupada porque, si es un principio socialista, ¿qué diablos ha estado haciendo Fidel durante los últimos 50 años? Ah, ya, que entre el comunismo y el socialismo hay diferencias pero...¿tantas?
Hasta ahora, todos los cubanos, tanto el campesino como el médico, cobraban más o menos lo mismo, 20 dólares que, al cambio, son 13 euros, pero ahora viene el hermano de Fidel y dice que ese igualitarismo “no es conveniente” y establece un suplemento máximo de hasta un 5% para el trabajador, y un 30% para los directivos. En serio, señores, pónganse de acuerdo porque empiezan a mezclar conceptos y al final se degenera en la diferencia de clases.
Lo dicho. Sigo teniendo dudas porque... comunismo, socialismo, capitalismo… al final todo termina igual, y no me refiero únicamente al sufijo, sino al hecho de que la diferencia salarial entre el ‘currito’ y el jefe siempre es considerable, pero es normal porque, como todo el mundo sabe, el jefe es siempre el que más trabaja, ¿verdad?
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